jueves, 19 de abril de 2012

El Buda de Oro - Wat Traimit- Bangkok

Todo buda que se precie debe tener su templo particular. La que ahora nos ocupa se encontraba en un templo que estaba ya abandonado pero por sus enormes dimensiones en vez de destruirla decidieron llevarla a otro lugar.

 

Fué trasladada a un templo en el barrio chino de Bangkok llamado Wat Traimit.

Su procedencia es de la que antes fue la capital de Tailandia, Ayutthaya, y su antigüedad todavía es cuestionada. Lo que si es cierto que además del enorme peso que tiene la estatua, además mide 3 metros de algo y pesa 5 toneladas y medio y es de oro macizo.


Cuando decidieron trasladarla tuvieron la mala suerte "entre comillas" de tener un pequeño accidente y la estatua se les cayó al suelo. Por las lluvias, por el peso de la estatua y "atención" esto es importante, como aparentemente no tenía demasiado valor ya que la estatua a ojos de los monjes era simplemente de estuco dorado decidieron esperar a que se apaciguara el tiempo para volver y ver el estado de la misma.

La sorpresa fue al regresar que la estatua se rompió y dejaba salir de su interior destellos brillantes dorados. La sorpresa fue mayúscula al comprobar que la estatua no solo era grande sino que era de oro macizo.

Tiene una altura de 3m y un peso de 5,5 toneladas. Es la mayor estatua de oro macizo del mundo. Está trabajada en el estilo de Sukhothai (1238-1370) pero podría haber sido fabricada posteriormente. Su procedencia de la antigua capital Ayutthaya impide considerar una fecha posterior a 1750.

El Buda está representado en la tradicional postura del Bhumisparshamudra (tocar la tierra como testigo, la mano derecha hacia el suelo). Las estatuas clásicas de estilo Sukhothai están sentadas en un zócalo ordinario. La llama que corona la protuberancia del cráneo o ushnisha es una innovación de Sukhothai que simboliza el resplandor de su energía espiritual. La línea de su peinado forma una larga « V » en la raíz de los cabellos, subrayada por la curva elegante de las cejas que se apoyan sobre el arco de la nariz aguileña en forma de « pico de loro », según las normas prescritas.
Los tres pliegues en el cuello y los lóbulos de las orejas muy alargados, señal de su anterior status de príncipe, también forman parte del código, lo mismo que sus anchos hombros y el pecho henchido por una inspiración imaginaria.